Una vez que, tú y yo, tenemos la certeza de que "somos seres espirituales que hemos venido a la tierra para vivir una experiencia humana", (como nos recuerdan ancestros como los aborígenes australianos).

Te das cuenta, en primer lugar, de que has venido a COMPRENDER los aprendizajes básicos que rigen nuestra vida.

Por ejemplo, comprender cómo es pasar de depender de otros, hasta para alimentarte, a ser sostenedor-a de ti mismo-a porque aprendes a equilibrar reflexión y acción.   

Comprender que necesitas soltar para liberarte y que incorporar para avanzar... cómo es que tu cerebro emocional está tan vinculado a la percepción que tienes de TI.

Comprender tu necesidad de ser aceptado-a, para relacionarte de forma consciente y conectada a la alegría de vivir.

Comprender cómo es soltar cualquier dependencia de ideas, rutinas o hábitos que te mantienen anclado-a en el temor a lo que consideras desconocido o ajeno a tu mundo.

Comprender que cuando eres consciente de tu forma de funcionar y gestionar tus emociones aprovechas mucho mejor tus recursos personales en las relaciones. 

COMPRENDER que si estás AQUÍ es que la vida te quiere AHORA, quiere brindarte la oportunidad de saborear y compartir eso que sólo tú puedes aportar y que pasa por la aceptación de ti...

Reconocerte, para liberar tu PRESENCIA del marasmo de comportamientos, rutinas y hábitos mentales, heredados y aprendidos, que te impedían pronunciar tu VOZ y experimentar su impacto benéfico en TI y alrededor de TI.   

Y para comprenderte, sólo necesitas, QUERER hacerlo y... ¡¡¡HACERLO!!

Todo es ponerse :D

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©  Anael Tree