¿Recuerdas... esos apretados corsés que llevaban las mujeres en siglos pasados, con los que casi no podían respirar…? ¿o esas pesadas armaduras... y cascos, para defender la integridad física, en cruentas batallas cuerpo a cuerpo?
¿Verdad que se agradece estar aquí y AHORA sintiéndote cada vez más cerca del CUERPO como instrumento de PAZ? Tu cuerpo, cuando lo escuchas, te ayuda a DESPERTAR porque siempre te está contando que pensamientos aprietan como un corsé o bloquean tu conexión con el mundo como una armadura... O que pensamientos desatan tu alma en cada rincón de ti y te vinculan con la alegría de vivir, de SENTIR.
Tu cuerpo es un chivato, el delator por excelencia de todo lo que tiene que ver contigo y tu forma de relacionarte con el mundo y tus creaciones, (pensamientos y sentimientos), y con lo que eliges consumir: pensamientos y sentimientos ajenos, el tipo de aire que respiras, el agua que tomas, la comida que ingieres… el ejercicio que haces o no haces…
Tu cuerpo, por dentro y por fuera, cuenta cómo SUEÑAS tú la vida, cómo traduces y respondes a lo que te propone. ¿Qué tipo de vida estás SOÑANDO ahora?
Tu cuerpo delata y se deja impactar por la vibración emocional de cada palabra que pronuncias, por cómo eliges escuchar y proyectar tus pensamientos y sentimientos, si desde el juicio y la separación o desde la comprensión del universo particular del otro. Tu cuerpo es mágico y materializa tus sueños cotidianos.
Tu cuerpo es un TODO organizado, réplica del universo, luz en cada CÉLULA. Cuando eliges pensamientos de separación, competición, o escasez, (el famoso "tooo pa mi"), el mensaje que envías, a cada una de ellas, hace que TODO ese sistema organizado entre en incoherencia, te desvinculas de la tendencia natural del ser humano, de la UNIÓN, bloqueas tu inteligencia intuitiva... apagas la luz, te desvinculas del espíritu que te alienta, y tu cuerpo lo refleja.
¿En qué eliges fijarte, una y otra vez?, ¿en lo que no te gusta, en temer lo que no quieres que te suceda, o imaginar los peores desenlaces que puedan ocurrir, en que no eres merecedor-a de lo mejor que pueda pasarte? Recuerda, por fa, tu cuerpo, (tan obediente siempre), te sigue, para desajustarse cada vez más y más… o... si eliges COHERENCIA cardíaca... equilibrarse.
Es MAGIA, y tú hacedor-a de ELLA, del mismo modo que enfermas, puedes sanar, tu cuerpo puede empezar a ajustarse en cuanto comprendes que tu felicidad no depende de la realidad sino de la interpretación que TÚ haces de la misma.
Tu "cuerpo de LUZ" irradia todas tus creaciones, (mentales y emocionales). ERES responsable de cómo imantas tu interior y el espacio que te rodea, si emites toxicidad o contribuyes al Bien Común. Para el UNIVERSO tú y tu cuerpo sois una célula luminosa, que contribuye con todo lo que irradia a que la atmósfera que respiramos siga SIENDO fuente de vida, amor y luz, GRACIAS a tus elecciones.